Definición poética para Monforte

Por Daniel Berenguer Belló

No es más que calles enlazadas a la vida de sus vecinas y vecinos, una simbiosis de espacios vitales que simplifica la existencia. 

Una crítica constante sobre que queremos ser, un triste tigre comiendo trigo de un trigal.

Somos la eternidad de los pueblos pasados, el futuro incierto hendido en la cabeza del paisanaje.

Un racimo verde, que espera unos rayos dorados, un solar abandonado donde hundirse en las tabernas.

Monforte son las tripas de un unicornio domado, aire desoxigenado de nitrógeno lleno. Sin brazos, sin piernas, sin cumulonimbos ni estratos, una villa de sucesos, sin sujección en las formas.